Oración al Espíritu Santo de San Agustín de Hipona:
¡Oh divino Amor,
oh Lazo sagrado que unes al Padre y al Hijo.
Espíritu Todopoderoso,
fiel consolador de los afligidos,
penetra en los abismos de mi corazón!
Envía los rayos celestiales de tu amor
hasta el santuario de mi alma
para que penetren en ella
y enciendan llamas ardientes
que consuman todas mis debilidades
y negligencias.
Ven, Doctor de los humildes y
vencedor de los orgullosos.
Ven, Padre de los huérfanos,
esperanza de los pobres,
tesoro de los que están en indigencia.
Haz a mi alma sencilla,
dócil y fiel,
y compadécete de mi debilidad
con tanta bondad,
que mi pequeñez encuentre gracia
ante tu grandeza infinita,
mi impotencia fuerza
y mis ofensas alcancen perdón de tu misericordia.
Amén.