Oración del sábado
FIESTA DE SAN ANDRÉS
“Mi casa será una casa de oración”
+ En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
Oración inicial
Buen Jesús, quiero expresarte el deseo que tengo de encontrarme contigo. Necesito de tu amistad y sé que yo solo no puedo. Quiero ponerme en tus manos en este día y pedirte que me ilumines con tu gracia en esta oración, para ir transformando cada vez más mi corazón.
Acto penitencial
– (Hago en silencio un breve examen de conciencia de mi último día).
Señor, junto con este deseo de estar a tu lado, también experimento la ruptura en mi interior, la contradicción de querer estar siempre a tu lado, pero al mismo tiempo, alejarme de Ti por mis pecados. Te pido que me perdones y que me ayudes a ponerme de pie cada vez que tropiece.
Lectura Bíblica según el Evangelio del día: “Síganme, y yo los haré pescadores de hombres” (Mt 4, 18-22).
Mientras caminaba a orillas del mar de Galilea, Jesús vio a dos hermanos: a Simón, llamado Pedro, y a su hermano Andrés, que echaban las redes al mar porque eran pescadores. Entonces les dijo: “Síganme, y yo los haré pescadores de hombres”. Inmediatamente, ellos dejaron las redes y lo siguieron. Continuando su camino, vio a otros dos hermanos: a Santiago, hijo de Zebedeo, y a su hermano Juan, que estaban en la barca con Zebedeo, su padre, arreglando las redes; y Jesús los llamó. Inmediatamente, ellos dejaron la barca y a su padre, y lo siguieron.
Lectura espiritual breve
Escuchemos lo que nos dice San Atanasio:
Andrés fue el primero en reconocer al Señor como su Maestro…; dejó atrás las enseñanzas de Juan Bautista para entrar en el seguimiento de Cristo… a la luz de la lámpara (Jn 5,35), buscaba la verdadera luz; bajo su leve resplandor, se ocultaba el esplendor de Cristo… De maestro que era, Juan Bautista se convirtió en servidor y heraldo de Cristo presente ante él: “He aquí el Cordero de Dios que quita el pecado del mundo.” (Jn 1,29) Este es el que salva de la muerte; éste es el que destruye el pecado. Yo soy el enviado, no el esposo, pero soy el que acompaña al esposo. (Jn 3,29) Yo he venido como servidor, no como maestro. Empujado por estas palabras, Andrés abandona su antiguo maestro y corre hacia aquel que éste anunciaba… su deseo se manifiesta en su diligencia… llevando consigo a Juan, el evangelista. Los dos abandonan la antorcha (cf Jn 5,35) para seguir al sol… Andrés es la primera planta del jardín de los apóstoles, es él quien abre la puerta a la enseñanza de Cristo, él es el primero en recoger los frutos del campo cultivado por los profetas… Fue el primero en reconocer al profeta del cual Moisés había dicho: “El Señor, tu Dios, te suscitará de entre los tuyos, de entre tus hermanos, un profeta como yo. A él lo escucharéis.” (Dt 18,15)… Reconoció a aquel que anunciaron los profetas y condujo a su hermano Pedro hacia él. Le muestra a Pedro su tesoro: “Hemos encontrado al Mesías, (Jn 1,14) a aquel que anhelábamos. Esperábamos su venida: ven ahora a gustar de su presencia”… Andrés conduce a su hermano a Cristo… Era su primer milagro.
Breve meditación personal
– (Haz silencio en tu interior y pregúntate:)
1.- ¿Qué me dice el evangelio que he leído?
2.- ¿Cómo ilumina mi vida?
3.- ¿Qué tengo que cambiar para ser más como Jesús?
4.-¿Qué me falta para ser más como Él?
Acción de gracias y peticiones personales
Gracias Jesús por haberme llamado a seguirte. Ayúdame a dejar atrás todo aquello que me ata y que así como hicieron los apóstoles, yo también me decida a cumplir tu Plan con toda la generosidad de mi corazón.
Amén.
– (Si quieres, puedes pedirle al Señor por tus intenciones).
– Reza un Padre Nuestro, un Ave María y un Gloria…
Consagración a María
– Encomendémonos a nuestra Madre rezando:
Santa María,
Madre de la Esperanza,
junto a tu dulce Corazón
aprendo a esperar confiado.
Intercede
para que,
siguiendo tu ejemplo,
mi vida siempre
se encuentre afirmada
en la esperanza.
Amén.
+ En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.