Compartimos esta oración de Dios Padre de M. Basilea Schlink:
Abre nuestros ojos, Señor,
para que podamos verte a ti
en nuestros hermanos y hermanas.
Abre nuestros oídos, Señor,
para que podamos oír las invocaciones
de quien tiene hambre, frío, miedo
y de quien está oprimido.
Abre nuestro corazón, Señor,
para que aprendamos a amarnos los unos a los otros
como tú nos amas.
Danos otra vez tu Espíritu, Señor,
para que nos volvamos un sólo corazón
y una sola alma en tu nombre.
Amén.