“Quisiera llamar la atención una vez más sobre la necesidad para nuestra vida espiritual, de encontrar momentos cada día para orar con tranquilidad”
El Santo Padre, el día de ayer, recordándo a Santo Domingo de Guzmán, reflexionó sobre la importancia de la oración. Compartimos con ustedes un breve extracto:
“Queridos amigos, santo Domingo nos recuerda que en el origen del testimonio de fe -que todo cristiano debe dar en familia, en el trabajo, en el compromiso social, e incluso en los momentos de distensión-, está la oración; sólo una relación real con Dios nos da la fuerza para vivir intensamente todos los acontecimientos, especialmente los más dolorosos. Este Santo nos recuerda también la importancia de la actitud externa mientras rezamos. Estar de rodillas, de pie delante del Señor, fijar nuestra mirada en el Crucifijo, detenernos y recogernos en silencio, no es una cosa secundaria, sino que nos ayuda a ponernos interiormente con toda nuestra persona, en relación con Dios. Quisiera llamar la atención una vez más sobre la necesidad para nuestra vida espiritual, de encontrar momentos cada día para orar con tranquilidad; será también una manera de ayudar a los que nos rodean para entrar en el círculo luminoso de la presencia de Dios, que trae la paz y el amor que todos necesitamos.”