walking-with-jesus

Caminando en presencia de Dios

Por Kenneth Pierce

 

walking-with-jesus

San Pedro nos invita a dejarnos iluminar por la “gnosis”, por el conocimiento, para vivir de acuerdo al Plan de Dios. No se trata de cualquier conocimiento, sino de aquel relacionado de modo más directo a Dios y que nos permite avanzar decididamente por el camino de la santidad.

Hay un medio que nos ayuda de modo muy especial a vivir esta virtud: la “presencia de Dios”. ¿Qué significa andar en presencia de Dios? De modo muy general significa vivir con la conciencia de que Dios está siempre presente en nuestras vidas. No solo implica saber que nos está viendo, sino más aún una conciencia continua de que debe ser El el centro de nuestra vida.

Muchas veces nos debe haber pasado que algo que pensábamos hacer –sea bueno o malo- no lo hacemos sencillamente porque alguien nos está viendo. Si fuésemos conscientes, por ejemplo, de que Dios siempre nos está viendo, y de que El debe ser el centro de nuestra vida, probablemente nos sentiríamos urgidos a actuar de la mejor manera, en consonancia con lo que El nos pide.

La propuesta es positiva y no se trata de ver a Dios como el “gran hermano” de las utopías negativas. No es Dios un constante guardián atento para llamarnos la atención o castigarnos a la más mínima falta nuestra. Es, por el contrario, un Padre amoroso que siempre nos señala el camino que debemos recorrer para nuestra felicidad. Como nos dice el Señor en la Sagrada Escritura: «Anda en mi presencia y sé perfecto» (Gén 17,1).

Andar en presencia de Dios nos ayuda a escucharlo mejor, a discernir mejor sus designios, a tener una recta escala de valores que nos orienten en nuestra vida cotidiana. Nos ayuda a ver a nuestro prójimo como hermanos, hijos de un mismo Padre. Nos invita a considerar la realidad desde una perspectiva espiritual, no centrándonos solo en lo material e inmediato. Nos ayuda, asimismo, a recordar que el Señor está siempre con nosotros, en los momentos de felicidad y en los momentos de dificultades.

Quien camina en presencia de Dios podrá ser, además, un testimonio elocuente de la presencia del Señor en medio de los hombres y mujeres de nuestro tiempo.

Comentarios

Comentarios

Comparte esta publicación

Share on facebook
Share on twitter
Share on linkedin
Share on pinterest
Share on print
Share on email