Recemos, junto con el Papa Francisco, por la paz y pidámosle a María, Reina de la paz, que nos obtenga ese don y nos ayude a edificar una cultura del encuentro y de la paz:
Queridos hermanos y hermanas, quisiera hacerme intérprete del grito que, con creciente angustia, se levanta en todas las partes de la tierra, en todos los pueblos, en cada corazón, en la única gran familia que es la humanidad: ¡el grito de la paz! Es el grito que dice con fuerza: Queremos un mundo de paz, queremos ser hombres y mujeres de paz, queremos que en nuestra sociedad, desgarrada por divisiones y conflictos, estalle la paz
Pidamos a María que nos ayude a responder a la violencia, al conflicto y a la guerra, con la fuerza del diálogo, de la reconciliación y del amor. Ella es Madre. Que Ella nos ayude a encontrar la paz. Todos nosotros somos sus hijos. Ayúdanos, María, a superar este difícil momento y a comprometernos, todos los días y en todos los ambientes, en la construcción de una auténtica cultura del encuentro y de la paz. María, Reina de la Paz, ruega por nosotros.
Dios te salve María llena eres de gracia el señor es contigo bendita tú entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tú vientre Jesús santa María madre de Dios ruega por nosotros pecadores ahora y en la hora de nuestra muerte amén.
Muchas gracias Padre Francisco por sacudir mi espiritu y mi tienda de campaña perezosa a la oracion y caridad por la Paz y Reconciliacion de esta todavia bella HUMANIDAD.